Trajeron toda la comida y hasta hicieron la ensalada de frutas que en principio iba a hacer yo.
Se quedaron a dormir y hoy me ayudaron con el orden, la limpieza, y a desprenderme de cosas que ya no usamos como una colcha de telar en rosa (que con permiso de mi hermana que la hizo, se la voy a regalar a una amiga que va a tener una bebita pronto), y 2 en verde y turquesa que van a ser para el hijo de una amiga de mi hermana.
También me hizo algunas pelotitas de hilo.
No es ninguna novedad que a mi hermana le gustan las pelotitas de hilo. El problema es que a todos nos gustan. Su sueño es llenar un frasco de pelotitas multicolores pero la realidad es que no llega ni a guardarlas. Y ahora menos todavía. Las pelotitas que se transformaban en aros, collares, cuadritos tienen una nueva utilidad: transportar los aromas de Ana. Ana es una amiga del colegio de mi hermana que se dedica a la aromaterapia. Hace poco se reencontraron por casualidad y desde entonces las pelotitas empezaron a ser perfumadas. Collares, adornos para puertas, pelotitas chicas para guardar en los cajones ahora llevan aromas conocidos como jazmín y gardenia y no tanto como nerolí o vetiver. Las pelotitas de Bajo los Tilos y los aromas de L aromatelier son una lindísima combinación.
Pelotitas con Nerolí para la cajita de mi ahijada. |
Son chiquitas, menos de 1 cm de diámetro |
A un gato de verdad les gustaría jugar con estas más grandes |
que iban a ser para un gato pero se quedaron de adorno en la puerta |